Reseña: Jane Eyre - Charlotte Brontë

Título: Jane Eyre

Autor: Charlotte Brontë

Género: Narrativa extranjera, 

Clásicos

Editorial: Círculo de Lectores

Encuadernación: Dura con sobrecubiertas

Páginas: 527

Primera publicación: 1847 (Esta 1996)

Jane Eyre es una niña que queda huérfana en la Inglaterra victoriana, y tiene que ir a vivir con su tío, que también muere, quedando al cuidado de la malvada y desagradecida mujer de éste, que no le hace la vida nada fácil. Tras esto es enviada a un internado donde pasará algunos años. Cuando sale del internado va a trabajar como institutriz a casa del peculiar Señor Rochester, donde vivirá nuevas situaciones, pasiones y misterios.

Comienzo comentándoos como llegué a leer este libro, la verdad es que desde hace años he  visto bastantes veces una versión de la película basada en este libro producida en 1997, no es de las mejores, pero tantas veces que la vi en el pasado me gustó. Así que tenía un buen recuerdo y quería leer el libro. También, otro motivo es que cuando leí Cumbres borrascosas, de Emily Brontë, hermana de la autora, me encantó y quería leer más obras de las hermanas Brontë.

Y entrando de lleno en mi opinión sobre esta novela, prácticamente nada más comenzar a leer el libro ya me resultaba apasionante. Me ha impresionado profundamente. Y es un libro que realmente me llegó.

Para nada su lectura se me hizo aburrida como ocurre en ocasiones con otros clásicos, la manera de narrar está llena de inteligencia y astucia, las conversaciones entre Jane y el Señor Rochester son intensas y me daban ganas de continuar adelante sin parar.

Jane Eyre lo pasa muy mal en cada uno de los lugares a donde va en cada etapa de su vida. Y Charlotte Brontë nos muestra la crudeza de la vida y la profundidad de sentimientos que la protagonista puede llegar a sentir, hasta el punto que llegaba a conmoverme. Y la inteligencia, ya que Jane es verdaderamente inteligente y elocuente.

No puedo evitar hacer un inciso en esta reseña para comparar esta obra con la obra de Jane Austen, incluso yo diría que para comparar la obra de las hermanas Brontë con la obra de Jane Austen. Todo el tiempo, cuando leo algo de las Brontë no puedo evitar hacer esta comparación. Ya que la obra de Jane Austen me parece frívola, poco profunda y ñoña, completamente carente de profundidad, a pesar de que Austen intenta plasmar a personajes especiales, que piensan de un modo diferente y que intentan alejarse de esa frivolidad, pero es que le falta sentimiento y pasión, le falta crudeza y dureza y dolor. En cambio, la obra de las hermanas Brontë es mucho más profunda, supongo que porque pasaron una vida mucho más dura. Poniendo el ejemplo de Jane Eyre, Charlotte Brontë cuenta cosas humanas, reales, severas… y a pesar de que ella viviera hace mucho tiempo, incluso actualmente en el siglo XXI, como nosotros también somos humanos, podemos sentirnos identificados. Y eso es algo, que en absoluto me pasa con la obra de Jane Austen. Así que la novela Jane Eyre me fascina completamente.

Sólo hay una cosa del libro que no me ha gustado, y que en mi opinión estropea la profundidad y la inteligencia de las ideas plasmadas en el libro, y es que se nota que Charlotte Brönte era hija de un clérigo. Habla demasiado de la biblia, y al principio y al final, es religioso en demasía, viendo el mundo solo a través de dios.  Parece estar aún mejor escrito que Cumbres borrascosas de su hermana Emily, pero Cumbres  borrascosas era menos religioso. Pero aun así, la novela es maravillosa, y esa religiosidad se puede pasar por alto.

Es uno de los mejores libros que he leído en mi vida. Creo que lo leeré muchas veces. Está lleno de sentimiento, pasión, odio, sinceridad, reflexiones profundas... Refleja la crudeza del mundo, el dolor y también el amor, y el carácter especial y libre de Jane Eyre. No puedo deciros más que qué lo leáis, porque es una gran novela.

Algunas frases que me gustaron:

“A mí me parece que la vida es demasiado corta para perderla en odios infantiles y en recuerdos de agravios.”

“Aunque todo el mundo te odiase, mientras tu conciencia estuviese tranquila, nunca te faltarían amigos”.

“Más vale comer hierbas en compañía de quienes os aman, que buena carne de buey con quienes os odian.”

“Que el error conlleva remordimiento, y que el remordimiento es el veneno de la existencia.”

“Qué las mujeres experimenten un amor para conservarlo oculto, porque ello las devoraría, y aun en el caso de ser confesado y correspondido, acabaría necesariamente, como ignis fatuus, convertido en un lodazal del que no hay escapatoria.”

“¡Qué verdadero es el aforismo según el cual “la belleza está en los ojos del que mira”!”

“Los sentimientos faltos de buen juicio son como un trago aguado, es cierto, pero la razón que no es templada por los sentimientos resulta un bocado demasiado amargo y duro para que un ser humano lo pueda digerir.”

Reseña de Cumbres Borrascosas, de Emily Brontë